martes, 14 de agosto de 2012

ALCHEMY ENTERTAINMENT


Charles Band, prototipo moderno de productor B o Z, surtió en los 80 desde la la extinta "Empire" con un conjunto de producciones terroríficas y de ciencia ficción, que le colocaron a la cabeza en la división anteriormente citada. Sin embargo, el tiro le salió por la culata y el provechoso negocio se vino abajo debido a su falta de previsión empresarial. Su segundo intento, menos impactante pero a la larga más provechoso fue la "Full Moon" compañía surgida en los albores de los 90 y que prolongó el espíritu de la "Empire" pero a menor escala y desde suelo americano.

A finales de los 90, con el fín de sacar beneficios rápidos con inversión casi nula, se sacó de la manga "Alchemy Entertainment", subdivisión de la compañía dedicada al "terror urbano", en otras palabras, resucitar la blaxploitation en clave terrorífica y emparentarla a la cultura hip hop. El resultado fue un conjunto de películas poco o nada vistas, rodadas con escasísimos medios y con el fin de explotarlas en el mercado doméstico. Vayamos con ellas, aunque su visionado pueda provocar alteraciones poco beneficiosas.

Ragdoll (1999). La marca de identidad de la "Full Moon" son los muñecos asesinos y aquí se adapta la fórmula al terror urbano. Una venganza sobrenatural, una entidad maléfica desencadenada, mafiosos controlando el negocio de la música, víctimas inocentes, una banda de hip hop en medio del embolado, una serie de muertes, un poco de sangre, algo de humor...Dirige Ted Nicolau, un todoterreno siempre al servicio de Charles Band, y el guión posiblemente sea algún descarte de la serie "Puppetmaster".

The Horrible Doctor Bones (2000). De nuevo Ted Nicolau al frente de una producción donde hay poco que cortar. Una banda de hip hop es respaldada por un misterioso productor musical llamado Dr. Bones. Sin embargo, al tal Bones la música le importa poco. Lo suyo es controlar al personal mediante conjuros y hechizos utilizando para ello las canciones del grupo. Gore, chistes, algún que otro zombie y poco más, para un filme que buscaba ser franquicia y  pereció por el camino. The Doctor is in the House! (y allí se quedó).

The Vault (2000). El fantasma de un brujo africano está encerrado por el bien de todos en un baul, el cual encuentra escondido en una casa abandonada. Un aburrido grupo de alumnos y su profesor acuden allí, con tan mala fortuna que liberan al citado espíritu provocando el terror esperado: muertes, sangre, situaciones mil veces vista,....Dirige un tal James Black, al que seguro que hemos visto como actor en un montón de películas.
Killjoy (2000). Si te han quedado ganas de seguir, prueba con esta película pues es la única del grupo que generó secuelas (reales y en los espectadores).  Un payaso diabólico con toda su parafernalia es invocado por un jovencito para que le ayude con los matones del barrio. El payaso empieza a matar a diestro y siniestro aunque no siempre de la manera esperada. Algo debieron de ver en la película cuando al menos ha dado ya para dos continuaciones. Como en el resto de estas producciones, sus escuetos 70 minutos dan para muy poco y el terror aunque lo parezca, brilla por su ausencia.



Continuará......

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